Mar, 16/11/2010 - 05:00
Por Farid Matuk
Economista
Economista
En efecto, en esta página (de Microdatos) se publican las rutinas de programación en Stata que se utilizan para el cálculo de la medición de la pobreza, las que permiten replicar los resultados publicados. (Carta del INEI del 3 de noviembre del 2010)
El texto completo de la carta citada arriba se encuentra disponible enwww.29x55.com, pero lo más resaltante es la mentira flagrante con la que una institución gubernamental intenta confundir a la opinión pública en un tema tan delicado como la medición de la pobreza en nuestro país.
Siguiendo la lógica de la carta del INEI, se podría concluir que la medición de la pobreza es replicable con las rutinas de programación en Stata disponibles en internet, pero el pequeño problema es que dichas rutinas no están disponibles en la página mencionada.
Según el INEI, primero se tiene que abrir la página www.inei.gob.pe, en el lado derecho inferior hay un enlace llamado “Microdatos” que al presionarlo abre una ventana en la que es necesario presionar la palabra “Entrar” y de esta manera llegar al área de almacenamiento de las bases de datos, mas no de ninguna rutina de programación.
Para hallar los últimos resultados de pobreza disponibles, se tiene que seleccionar la encuesta de “Niveles de Vida y Pobreza - ENAHO”, el año 2009 y el periodo “Anual (Ene-Dic)” y obtener así 29 bases de datos correspondientes a la ENAHO, y ningún archivo en Stata correspondiente a las rutinas de programación.
De los 29 archivos, el número 24 denominado “Sumarias (Variables Calculadas)” contiene los resultados adulterados de pobreza que permiten la vanagloria presidencial de afirmar que en el Perú la pobreza se ha reducido más rápidamente que en ningún otro país del mundo. Estos resultados adulterados son imposibles de ser replicados de manera independiente, con las bases de datos originales disponibles.
La razón que explica la ausencia de las rutinas de programación en Stata es sumamente simple: no hay método matemático que permite replicar las cifras oficiales de pobreza a partir de las bases de datos originales. Porque la reducción exagerada de la
pobreza es el resultado de la adulteración sistemática de los procedimientos internacionales para la medición de la misma.
Pero lo que llama la atención es el silencio cómplice de los académicos y de los órganos internacionales que forman parte de la “Comisión Consultiva para la estimación de la pobreza” que desde el 2007 hasta el 2010, pasando por el 2008 y el 2009, se limita a la retórica invocatoria de “poner a disposición del público, vía la página web, las rutinas de programación que permitan replicar los resultados publicados”, cuando en realidad todos ellos conocen bien que nadie puede replicar los resultados de pobreza.
Ciertamente el problema real de los académicos y de los organismos internacionales es desenmascarar la mentira promovida desde Palacio de Gobierno que la pobreza se ha reducido en magnitudes siderales. Pero en la presente coyuntura, en la que la confrontación al partido de gobierno se hace factible, las verdaderas cifras de la magnitud de la pobreza con certeza serán reveladas más de una vez.