Kurt Burneo F.
Ante el anunciado relevo del Ministro de Economía, creo que podría ser útil comentar cuales deberían ser las tareas principales que con urgencia deberían ser adoptadas por el MEF; medidas que justamente se constituirían como la respuesta técnica a los dos desequilibrios que se están produciendo a la fecha: Una creciente inflación y un creciente deterioro de las cuentas externas.
Al margen que absurdamente el oficialismo económico sigue insistiendo en el argumento que las altas (y artificiales) tasas de crecimiento, que se constituyen como algo bueno per se, sin preguntarse sobre la sostenibilidad de estas y mucho menos sobre los desequilibrios que estos episódicos saltos del producto generan; justamente es necesario llamar la atención sobre estos últimos. El caso es que el BCR pronostica que el PBI crecerá en 8% este año y un 6.5% el próximo; y ya en los primeros cuatro meses el producto creció en 10.5%, crecimiento a su vez explicado por una expansión de la demanda interna que aumentó en periodo similar en 12.1%. Frente a un producto potencial que no crece más allá del 7%.
Es evidente que se está generando presiones sobre los precios por el lado de la demanda.
¿Cómo se hacen evidentes estas presiones? Tal como lo he venido sosteniendo desde meses atrás, en que comenzaba a evidenciarse este desequilibrio; una creciente inflación subyacente desde mediados del año pasado aportaría un claro indicio sobre lo que viene ocurriendo, es así que la inflación subyacente anualizada al mes de junio alcanzó un 4.66%.
Por otro lado, la inflación en general en términos anualizados alcanzó un 5.71% en periodo similar, -con embalse en el precio de los combustibles incluido (y que hasta el momento implica un pasivo pendiente aún de registro para el gobierno central de S/. 1,400 mills); ambos resultados son bastante mayores respecto a la meta inflacionaria del BCR:2%+-1. , La explicación oficial sobre el aumento de la inflación se sustenta en el alza de los precios externos de los alimentos (alrededor de 11%). En contraposición a este argumento; si consideramos la parte de la inflación que marginalmente tiene que ver con la externa, cual es la de los bienes no transables, esta alcanzó un 5.2%.
El otro aspecto del desequilibrio generado es el deterioro de las cuentas externas. Al primer trimestre de 2008 luego de varios años de superávits, ya aparece un déficit en cuenta corriente de 2.2% del PBI y un disminuido superávit comercial respecto a años anteriores… Es claro que la demanda interna creciente implicará una mayor demanda por importaciones, tendencia exacerbada por la apreciación del sol junto a menores tasas arancelarias.
Como mencioné, detrás de las altas tasas de crecimiento del PBI se tiene una alta expansión de la demanda interna que la explica; demanda que crece porque esta aumentando la inversión y consumo privados al haberse expandido en términos importantes el crédito en soles y dólares gracias a una laxa política monetaria desarrollada durante buen tiempo por el actual directorio del BCR; pero también la demanda interna crece, porque el gasto público lo hace gracias a la política fiscal procíclica desarrollada por el MEF. Esto último se evidencia a partir de proyectados menores superávits nominales, los cuales una vez descontados los temporales incrementos en la recaudación fiscal, se transforman en crecientes déficits estructurales, propulsándose así el gasto agregado y también una innecesaria mayor volatilidad del PBI.
¿Frente a lo descrito que debería hacerse por el lado fiscal? Aparte de comenzar a sincerar las cuentas fiscales, dado que los S/.1,400 millones pendientes de pagar en aplicación del Fondo de Estabilización de Combustibles no están aún reflejados en dichas cuentas; lo urgente es bajar la velocidad de crecimiento del gasto público real (proyectada en 12% para este año) de tal forma que el superávit nominal pase de 2 a cuando menos 3% del PBI; ello además de moderar las presiones internas sobre la inflación y el deterioro de la cuenta corriente, permitiría incrementar el Fondo de Estabilización Fiscal (que hasta ahora solo cuenta con menos del 0.5% del PBI), factor clave para moderar el inevitable ajuste fiscal, que deberá hacerse cuando se revierta la actual fase expansiva del ciclo económico.
.
1
Publicar un comentario